7 de 10 patentes de licor en La Cali y Escalante se otorgaron en últimos 5 años; solo una fue de bar

En el extremo este del cantón de San José, dos barrios relativamente pequeños se han convertido en focos de la vida nocturna y la gastronomía en la ciudad, con una creciente oferta de comercios que genera la sensación de que en muy poco tiempo se han multiplicado las opciones para comer y/o tomar.

Se trata de los colindantes barrios Escalante y La California, que acaparan más del 60% de todas las patentes de licor de El Carmen, el distrito más pequeño y menos poblado del cantón josefino. En apenas un 3,3% de la superficie del cantón, dicho distrito ya concentra el 17% de las patentes de licor de San José.

Según datos hasta diciembre de 2022 de la Municipalidad de San José (MSJ) solicitados por AmeliaRueda.com, en El Carmen hay 239 licencias para vender alcohol, lo que incluye desde bares hasta supermercados, pasando por licoreras, restaurantes, hoteles, clubes nocturnos, pensiones y minisúpers.

Un análisis de este medio sobre los citados datos reveló que, de esas 239 patentes del distrito de El Carmen, 139 están en Escalante y La California (popularmente conocida como 'La Cali'). No obstante, La Cali está entre dos distritos, pues una zona pertenece al de Catedral, donde hay otras 17 patentes asociadas a ese barrio.

Concretamente, en barrio Escalante hay en total 93 patentes de licor, por encima de las 63 que se encuentran en La Cali. Siete de cada diez patentes activas en estos barrios se otorgaron en los últimos cinco años. Esto significa que 66 de las 93 licencias en Escalante se emitieron entre 2018 y 2022, mientras que en el caso de La Cali fueron 46 de 63.

Estas patentes representan el 52,6% de todas las del distrito de El Carmen en ese mismo periodo.

Por cada bar, 70 restaurantes

Aunque estos barrios son reconocidos por ser estampas de la vida nocturna de San José (La Cali más que Escalante, donde también es reconocida su variedad gastronómica), solo dos de todas las patentes registradas en sus confines son de bar, mientras que cuatro tienen licencia de licor para club nocturno.

Estas patentes de bar o club nocturno son de establecimientos de La California. No obstante, en ese barrio hay 50 patentes de restaurante, que se entregan a comercios cuya actividad principal en teoría es la venta de comida y la secundaria la venta de alcohol, y que pueden cerrar a las 2:30 a.m. mientras sigan vendiendo comida.

En Escalante, las patentes de restaurante ascienden a 89. Es decir, el 96% de todas las licencias para vender licor en ese barrio están en manos de restaurantes, una relación que en el caso de La Cali es del 79%.

En Escalante hay además dos patentes de hotel, una de minisuper y otra de cafetería. En La California, además de bares, clubes nocturnos y restaurantes, hay cinco patentes de minisúper, una de hotel y otra de licorera.

Estos barrios repiten patrones que se dan en el resto del cantón, como que en los últimos años se otorgaran más licencias de licor para restaurantes que para cualquier otro tipo de establecimiento, o que en ese mismo periodo aumentara notablemente la cantidad de patentes que se entregan desde la MSJ.

Según la oficina de Patentes de la Municipalidad, desde que en 2012 se aprobó una nueva Ley de licores la cantidad de licencias se ha disparado. El crecimiento ha sido tal que el ayuntamiento actualmente trabaja en un nuevo reglamento de esa ley, para precisamente definir mejor qué es un restaurante y qué no lo es.

En todo el cantón, el promedio de patentes nuevas por año se duplicó entre 2018 y 2022 en comparación con el periodo anterior de cinco años. De todas las patentes activas actualmente en la ciudad capital, el 77% se entregaron en la última década; el 54% de ellas se concedió a negocios calificados como restaurantes.

Los datos de la MSJ no incluyen aquellas patentes que pudieron haberse dado pero que ya no están activas, por lo que es posible que en estos barrios hubiera comercios con venta de licor que cerraran en el periodo de estudio y que no se incluyeran en el análisis por no tratarse de licencias actualmente activas.