Estructura se conformó en Venezuela hace más de 10 años y está relacionado con todo tipo de delitos, principalmente, trata de personas
24/05/25 | 06:30am
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) enciende las alertas ante la posible presencia de miembros del Tren de Aragua en Costa Rica. Incluso, se investiga la relación de dicho grupo criminal con dos homicidios registrados en la capital.
Se trata de una estructura internacional, conformada en Venezuela en 2014 dentro de la cárcel de Tocorón en el estado de Aragua y están vinculados a diversos delitos, entre ellos asesinatos, secuestros, extorsión, robos y venta de drogas.
Expertos explican que, a raíz de la ola migratoria y el paso de venezolanos por diversos países, el grupo criminal logró expandirse por toda la región ampliando sus tentáculos con más fuerza en los delitos de prostitución y trata de personas.
El subdirector del OIJ, Michael Soto, dijo que el fenómeno del Tren de Aragua es un fenómeno latinoamericano que tiene que ver con migración, pero criminal, el cual “ya nos alcanzó a nosotros” y su presencia genera “problemáticas importantes”.
La semana anterior se informó que un presunto integrante de dicha agrupación (Tren de Aragua) se ocultaba en el país y fue extraditado a Chile. El hombre de apellido Espinoza es señalado por cometer delitos en ese país (Chile) como secuestros extorsivos, tráficos de drogas y homicidios.
La preocupación de las autoridades se da por los delitos que se vinculan a esta banda, y por esa razón desde el OIJ se coordinan acciones de información e investigación con otros cuerpos policiales de la región.
“De hecho por ahí tenemos dos homicidios de dos ciudadanos venezolanos, uno aquí en el centro de San José, en un bar que antes se dedicaba a actividades sexuales, y otro en los barrios del sur y eso nos generó una alerta para tratar de establecer si hay un vínculo o no", explicó el subdirector del OIJ.
Michael Soto – subdirector del OIJ
Para el funcionario, es un fenómeno presente que debe analizarse con cuidado para evitar su expansión en el país, como ocurrió años atrás con la presencia de miembros de pandillas salvadoreñas, situación que según Soto se logró contener.
La preocupación de las autoridades es mayor al tomar en cuenta que el Tren de Aragua tiene una fuerte incidencia en los delitos de trata de personas y explotación sexual de mujeres; esto al tomar en cuenta que representan acciones “inhumanas” y se aprovechan de la vulnerabilidad de las personas.
Soto dijo que este tipo de grupos buscan mujeres de nacionalidades de países en conflicto o situaciones económicas vulnerables, las cuales ayudan a migrar, pero a cambio las involucran en las redes de la prostitución, “así les cobran los favores”.
Para el funcionario, el negocio de la trata de personas actualmente se ha vuelto, lamentablemente, tan lucrativo como el tráfico de drogas o armas.
“Hay un mercado de hombres muy fuerte que consume este tipo de servicios y las redes criminales aprovechan esto, es oferta y demanda”, aseguró.
Michael Soto – subdirector del OIJ
La problemática que genera este grupo criminal está en la mira de todas las autoridades. Recientemente el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó a la estructura como una “organización terrorista extranjera”.
En marzo anterior, El Salvador recibió a 238 presuntos miembros de esta banda que fueron deportados desde EEUU para ser recluidos en la cárcel de máxima seguridad de ese país, el Centro de Reclusión del Terrorismo (Cecot).
Los miembros del Tren de Aragua están vinculados en este momento con redes de tráfico de personas en Estados Unidos, Colombia, Perú, Chile, entre otros.
Lea: EEUU envía a cárcel de El Salvador a 238 presuntos miembros del Tren de Aragua
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