Nayib Bukele será recibido en la Asamblea Legislativa el próximo 11 de noviembre, confirma Rodrigo Arias

El presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias, comunicó este miércoles que recibirá al presidente de la república de El Salvador, Nayib Bukele, en el Congreso el próximo 11 de noviembre, en el marco de una visita de Estado que realizará en nuestro país el mandatario centroamericano.

Así lo hizo saber el legislador en una atención de prensa tras la acostumbrada reunión de jefes de bancadas, en la cual se suponía iba a discutir el tema con los líderes de cada una de las fracciones.

"A mí me informó el Canciller telefónicamente de que la visita iba a ser el lunes 11 de noviembre a partir de las 2:00 p. m. (...) que iba a comenzar primero en reunión con el presidente en Casa Presidencial y que estaba previsto en agenda que el presidente Bukele visitara los poderes judicial y legislativo", indicó.

En ese sentido, añadió Arias Sánchez, le transmitió al jerarca de la diplomacia costarricense que una visita para dirigirse al Plenario no se hacía viable, por lo que acordaron que fuera recibido solamente por la presidencia del Congreso.

"Me pareció que sería importante invitar a los jefes de fracción a que me acompañaran en esa reunión, entonces ayer (miércoles), en un receso que tuvimos para ver la agenda del próximo jueves, les informé para que me acompañaran a recibirlo", indicó el diputado liberacionista.

Arias enfatizó en que, más allá de estar de acuerdo o no con visión política de Bukele, su rol como presidente del Congreso es cumplir con una norma de protocolo internacional.

Reelegido en el cargo presidencial en febrero anterior, Nayib Bukele ocupa el máximo cargo político en El Salvador desde 2019, destacándose a nivel regional y alrededor del mundo por la reducción en los niveles de criminalidad en ese país, lo cual fue destacado por el presidente de la República, Rodrigo Chaves, este miércoles.

Por otra parte, esa misma política de "cero tolerancia" al crimen callejero, que lo llevó a la construcción de una mega cárcel para recluir a presuntos miembros de pandillas, ha generado algunas posiciones adversas por parte de organizaciones de derechos humanos.