Transexuales reclusos en cárceles nacionales podrán optar entre prisión de hombres o mujeres

Las personas privadas de libertad del país que se autodefinen como transexuales tendrán la opción de elegir si cumplen su pena en un centro de detención para hombres o en uno para mujeres. Es decir, un recluso con genitales masculinos que se considere del género femenino podrá solicitar que se le reubique en una cárcel de mujeres. La alternativa también funcionará a la inversa.

Esa posibilidad es parte de una serie de acciones que el Ministerio de Justicia pretende implementar con la finalidad de respetar la diversidad e identidad sexual de la población carcelaria.

La iniciativa es pionera en la región y toma como ejemplo el sistema penitenciario de España, donde ya existe la opción, señaló el viceministro de Justicia, Marco Feoli, quien obtuvo un doctorado en Estado de Derecho y Gobernanza en esa nación europea.

Trabajadores sociales, sicólogos y técnicos penitenciarios participarán del proceso de reubicación de los reclusos, explicó Feoli. El objetivo es que los primeros traslados empiecen en agosto y setiembre próximos.

El Viceministro indicó que desde hace dos meses se giró una circular a los directores de los centros penitenciarios solicitándoles un censo entre los privados de libertad para determinar cuántos se autodefinen como transexuales; a ellos, además, se les consultará si prefieren estar en una cárcel que calce con su identidad de género. Incluso se baraja la alternativa de crear un módulo exclusivo para personas transexuales.

El funcionario detalló que antes de tomar una decisión van a analizar la opinión de los privados de libertad. Esta etapa, en donde se recoge la información y criterio de los reclusos, concluirá a finales de julio.

El traslado de los privados de libertad será voluntario, enfatizó Feoli, y se respetará la decisión de cada uno de los transexuales, tomando en consideración los aspectos técnicos y fundamentos que aporten los profesionales en sicología y trabajo social del Ministerio.

Protección y respeto

"Lo que está haciendo Justicia es algo por lo que veníamos clamando desde hace tiempo, es un gran avance y una muestra de respeto". Las palabras son del abogado Marco Castillo, presidente del Movimiento Diversidad, organización que lucha por los derechos de la población LGTBI (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexo).

Castillo dio sus primeros pasos en el activismo de los derechos humanos en la década de los 80, cuando defendía legalmente a las trabajadoras sexuales transgénero (en ese entonces denominadas travestis) contra los abusos policiales. Él sostiene que la iniciativa de reubicación de privados de libertad de acuerdo a su identidad protegerá la integridad física de estos, pues, debido a su condición, sufren agresiones físicas y sexuales de parte de otros reclusos.

Aunado a este plan de traslados voluntarios, desde el 2016, el ministerio de Justicia trabaja con el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) en la elaboración de protocolos de atención para poblaciones vulnerables dentro del sistema penitenciario, entre ellas la comunidad LGBTI. También ha coordinado con organizaciones sociales como el Frente de Derechos Igualitarios y Transvida para brindar capacitaciones a la Policía Penitenciaria.

Fotografía tomada de Facebook del Ministerio de Justicia. En la imagen aparecen el viceministro Marco Feoli y la ministra Cecilia Sánchez con dos privados de libertad durante los Pride Awards, un evento que organiza la comunidad LGBTI para reconocer el talento y el arte de ese colectivo.