Proyecto de colegialas ticas convierte llantas usadas en tejas amigables con el ambiente

¿Se imagina colocarle un techo más económico, flexible y liviano a su casa y a la vez ayudar al ambiente en el proceso?

Esa es la propuesta de Sharon Monge y Daniela Moreno, dos estudiantes del Colegio Técnico Profesional de Carrizal de Alajuela con su proyecto 'Roof Tiles WRT', que presentaron en la Expo Ingeniería 2016 organizada por el Ministerio de Educación Pública esta semana en el Estadio Nacional.

El proyecto consiste en la creación de tejas elaboradas con llantas que no logran colocarse en el mercado porque tienen algún defecto o llantas que ya han sido utilizadas y desechadas por los usuarios.

Según el Coordinador Nacional de Control de Vectores del Ministerio de Salud, Rodrigo Marín, se calcula que en Costa Rica se comercializan 1.2 millones de llantas anualmente.

Sólo el 10% de las llantas que cumplen su ciclo de rodamiento, son tratadas de manera adecuada. El otro 90% terminan abandonadas en lotes baldíos y ríos, calculó.

Aparte de la contaminación que estos desechos significan para el ambiente, también son un peligro para la salud debido al potencial que tienen para albergar criaderos del mosquito ‘Aedes aegypti’, transmisor de enfermedades como dengue, chikunguña y zika.

Una llanta tarda entre 500 y 600 años en degradarse completamente. Al colocarla en techos de casas, su vida útil aumentaría notoriamente y se diminuiría el impacto ambiental de estos desechos.

Las tejas de caucho miden 20x20 centímetros y se necesitan 24 para cubrir un metro cuadrado ya que se colocan 12 tejas 'cobija' y 12 tejas 'canal' para garantizar que el agua no se filtre y circule de manera correcta en dirección a las canoas.

Para una casa de bien social que posee una cubierta de aproximadamente 42 metros cuadrados se necesitan 112 llantas. De una llanta de aro 14 ó 16 (los más comunes entre automóviles), se pueden sacar 9 tejas.

Otros beneficios físicos que ofrece esta iniciativa es que las tejas de caucho son impermeables, pesan hasta un 50% menos que las tejas de barro, son de larga durabilidad, no se quiebran y son flexibles.

En promedio, las llantas de automóviles tienen 2 centímetros de grosor por lo que las tejas de caucho son ideales para proteger las viviendas de las altas o bajas temperaturas.

Actualmente el proyecto se encuentra en pruebas de laboratorio para poder ofrecerlo en el mercado como una alternativa más a la carbono neutralidad.