Taxistas vuelven a amenazar por Uber: “Estamos hartos de rogarle al Gobierno una solución"

El gremio de taxistas no cesa en sus amenazas de protestas para exigir el bloqueo de la aplicación de transporte privado Uber.

La mañana de este miércoles, un día después de que centenares de conductores se concentraran en las afueras de Casa Presidencial e hicieran colapsar Zapote y otros sectores de San José, la causa de la movilización creció en número al sumar al Foro Nacional de Taxistas y a la Federación Nacional de Cooperativas de Taxis de Costa Rica (Fenacootaxi) que juntas agrupan a unas ocho mil personas.

Gilberth Ureña, representante de ambas organizaciones, participó en el programa Nuestra Voz y fue directo al referirse a la protesta del martes, coordinadas por la Coalición Nacional de Transporte Público (Conatrap), la Unión de Taxistas Costarricenses (UTC) y Servicio Especial Estable de Taxi (Seetaxi): “Estamos hartos de rogarle al Gobierno una solución".

"Desde las tres de la mañana, el Foro Nacional de Taxistas y Fenacootaxi han declarado estado de emergencia... promovemos una reunión entre las agrupaciones para convocar a todos nuestros afiliados a nivel nacional, que son más de ocho mil, a unirse al movimiento de protestas que están llevando a cabo organizaciones hermanas en defensa de la comida de las familias taxistas", añadió el líder gremial.

Ureña evitó definir a qué se refería específicamente con esa declaratoria de "emergencia nacional" pero, junto al secretario general de la UTC, Rubén Vargas, advirtió que nuevas manifestaciones podrían anunciarse en las próximas horas.

De acuerdo con Vargas, vocero de los organizadores de la protesta del 3 de julio, el movimiento no terminó como lo habían pretendido, ya que no se logró un encuentro con el presidente de la República, Carlos Alvarado, sino más bien uno con el ministro de Transportes, Rodolfo Méndez.

Esa reunión se dio a eso de las 5:00 p.m. en la sede central del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y se prolongó por varias horas. Ahí mismo se acordó un nuevo encuentro para este miércoles a las 8:30 a.m. en el mismo lugar, pero con el viceministro Eduardo Brenes, con el objetivo de conocer el "daño social" causado por la Uber a los taxistas. Incluso los transportistas pasaron la noche fuera de la Presidencia como medida de presión.

Los manifestantes alegan que el Gobierno de la República se ha negado en varias ocasiones a concederles una cita con el mandatario y otros cinco jerarcas y que en cambio les han ofrecido la apertura de unas comisiones mixtas para abordar la regularización de la plataforma, que en su mayoría estarían conformadas por viceministros.

Fotografía tomada por Paulo Villalobos Saborío.