Rodolfo Piza se convirtió este domingo en el nuevo aspirante presidencial por el Partido Unidad Social Cristiana
04/06/17 | 21:35pm
Rodolfo Piza habla a 25 dichos por hora. Es parte de su estilo en los debates y en las actividades públicas donde quiere sentirse cercano a la ciudadanía hablando "su mismo idioma".
Del dicho, el socialcristiano pasó al hecho, al convertirse este domingo en el rostro rojiazul para las elecciones del próximo febrero del 2018. Con 42% de las mesas escrutadas Rodolfo Piza obtuvo un 69%, Rafael Ortiz un 24%. Con estos resultados Ortiz aceptó su derrota, aunque poco después de las 10 p.m. un nuevo corte del Tribunal Electoral Interno confirmó la tendencia: con un 48% de mesas Rafael Ortiz acumulaba un 24% mientras Rodolfo Piza un 69%, equivalente a 39.795 votos para Piza y 14.078 para Ortiz.
Piza Rocafort se lanzará por segunda ocasión a una contienda presidencial, aunque esta vez tendrá la oportunidad de hacer campaña desde el principio y no salir al rescate como le tocó en el naufragio ocurrido en octubre del 2014 cuando su rival Rodolfo Hernández abandonó el barco.
El socialcristiano tendrá la tarea de reconquistar a los "mariachis" y volver a levantar a su agrupación, la cual pasó de ser una sólida segunda fuerza política a formar parte de las barras pequeñas en los gráficos de resultados electorales.
Una de las promesas que genera expectativa en algunos y escepticismo en otros es la construcción de un metro en San José de 6 a 9,5 kilómetros. Pese a los $100 millones que lo separan de la realidad, Piza sostiene su promesa.
El abogado de 58 años también cree en la reforma del aparato estatal para contener el gasto público, ampliar centros penitenciarios y desincentivar la despenalización de delitos menores, generar más empleo, ampliar las redes de cuido para hogares liderados por mujeres, evitar el matrimonio igualitario entre parejas del mismo sexo y el aborto.
Piza no es ajeno a la vida política. Tras cursar sus estudios en derecho, siguiendo los pasos de su padre (Rodolfo Piza Escalante, quien llegó a ser presidente de la Corte Suprema de Justicia), comenzó en este mundo como asesor parlamentario cuando tenía 20 años.
El socialcristiano probó los diferentes sabores de su profesión al desempeñarse como investigador del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, litigante y consultor, profesor en derecho público e internacional.
En la década de los noventa dio el salto a la diplomacia cuando asumió el cargo de embajador alterno de Costa Rica en la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Fue durante la administración de Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002) cuando ocupó el puesto público más importante hasta ese momento: presidente de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Cuando cumplió los 51 se convirtió en magistrado suplente de la Sala Constitucional.
Tres años después formó parte de la junta de notables convocada por la entonces presidenta de la República, Laura Chinchilla (2010-2014), para plantear reformas que requería el Estado con la finalidad de luchar contra la ingobernabilidad.
A lo largo de su vida la pluma también lo ha llamado, publicando una decena de libros sobre derecho.
En los últimos meses se desempeñó como secretario general del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) hasta que en diciembre del 2015 decidió postular su nombre a la presidencia.
Fotografía tomada del Facebook de Rodolfo Piza.
Video: Manuel Avendaño
Noticias, reportajes videos,
investigación, infografías.
Periodismo independiente en Costa Rica.
(506)4032-7931
|
comunicados@ameliarueda.com
Privacidad