El rechazo social: la secuela silenciosa más cruel que deja el Covid-19

El rechazo social es la secuela silenciosa más cruel que deja el Covid-19, más allá de las secuelas biológicas, miles de pacientes llegan a buscar ayuda por los daños sociales y emociones que quedan tras el contagio del SARS-CoV-2.

“Son secuelas más comunes de lo que imaginamos. Es otro tipo de manifestaciones a las que no se les ha dado toda la importancia que deberían tener, son los daños emocionales, sociales y hasta económicos que deja el Covid-19”, manifestó el especialista en infectología y medicina interna del Hospital México, Álvaro Arturo Avilés.

Para el experto este tipo de secuelas pueden, incluso, ser más importantes porque las biológicas tienen la posibilidad de ser vistas por expertos de cada área.

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A la fecha no se tienen datos sobre la cantidad de pacientes recuperados con Covid-19 atendidos por esta causa.

“Ya nos han llegado informes de que hay gente que está siendo rechazada, hay, en algunos casos, una especie de fobia social donde los vecinos los rechazan como si fuera la peste negra.

“Esta gente se siente a nivel social castigada, se sienten frustrados y deprimidos porque además de estar enfermos y con necesidades de diversos tipos la gente les está dando la espalda”, dijo el doctor al agregar que esta es la parte humana más lamentable, que una persona sea señalada y llegue a sentirse culpable o deprimida por haberse enfermado.

Las secuelas emocionales tras el contagio de Covid-19 son muchas, el médico mencionó a quienes son rechazados, o bien, los casos donde una persona con diagnóstico positivo contagió a otro familiar que falleció, “ellos cargan un sentido de culpabilidad que también debemos tratar”.

Una persona recuperada de SARS-CoV-2 que empiece a experimentar depresión tiene diversos riesgos que provocan afectación social y económica, por ejemplo, a muchos les da temor o hasta vergüenza volver a sus trabajos y empiezan a convertirse en personas dependientes de otras, cuando antes no lo eran.

“Imagínese que la persona que se contagió y enfermó era la proveedora del hogar, imagínese que pierda el trabajo, ¿Cómo abastecen a su familia?, el Covid puede desarrollar aspectos sociales que posiblemente nadie ve o que no son parte de una estadística.

“La enfermedad tiene tantas aristas que se puede cometer el error de ver solo la parte biológica, pero hay muchas aristas más, la biológica se puede llegar a compensar, pero las situaciones emocionales y socioeconómicas no”, manifestó el experto a AmeliaRueda.com quien agregó que se tiene una tarea de trabajo social que apenas inicia porque existen personas que hasta ahora empiezan a sentir el rechazo y la depresión.

Avilés recordó lo sucedido en 1992 con la oleada de la pandemia del cólera en el mundo que tuvo su primer caso en Haití, el doctor recuerda que la primera persona contagiada en Costa Rica era una señora que vivía en Santo Domingo de Heredia, la cual tuvo que irse del lugar por el rechazo social: “le apedrearon la casa y por poco se la queman”, recuerda el médico quien lamentó que se castigue a una persona por el simple hecho de enfermarse, “es una reacción que une el temor con la ignorancia”, dijo.

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El reto como sociedad es muy grande, cada persona debe respetar las posibles secuelas que ha dejado el virus en miles de personas y prestar apoyo en caso de que alguna persona cercana necesite ayuda.

No juzgar, es una de las principales recomendaciones que da el especialista.

“He escuchado casos de personas que tuvieron Covid-19 y en sus trabajos dicen que están agotadas y de inmediato se escuchan expresiones de otras personas que dicen ´que vagabundos´ o que ´no quiere hacer nada´ eso es lamentable, en Costa Rica tendemos a minimizar lo que le pasa a los demás, porque creemos que los únicos importantes somos nosotros”, dijo.

En la Caja Costarricense de Seguro Social se tiene claro que las personas recuperadas de Covid-19 con secuelas emocionales requieren de tratamientos y acompañamiento integral y a nivel país, se tiene un duro trabajo por recuperar la salud mental de miles de personas que sin haberse contagiado también arrastran daños debido al temor y distanciamiento producidos por la pandemia.