PLN, Movimiento Libertario y Renovación Costarricense manejarán los hilos administrativos y del debate en el Congreso durante el próximo año.
01/05/16 | 18:55pm
Aunque el nombre de una mujer se escuchó desde la postulación al cargo de mayor importancia, la presidencia del Congreso, transcurrieron 7,5 horas de la sesión legislativa de este domingo para que los diputados abordaran el tema de género por el fondo para completar las plazas del Directorio legislativo.
El tema fue traído a discusión para elegir las suplencias. De los seis puestos que estaban en juego los tres ocupados por mujeres son cargos secundarios.
La jornada de elección, que en total se extendió por 11 horas y 34 minutos desde que se abrió la primera sesión a las 9: 00 a.m. dejó a Antonio Álvarez Desanti de Liberación Nacional (PLN) como presidente del Congreso, a José Alberto Alfaro del Movimiento Libertario como vicepresidente y a Gonzalo Ramírez de Renovación Costarricense en el cargo de Primer Secretario, los tres puestos de mayor relevancia del Directorio.
El cargo de la Segunda Secretaría fue para Marta Arauz también del PLN; en la Primera Prosecretaría la vencedora fue la libertaria Natalia Díaz quien el último año ocupaba la Segunda Prosecretaría, y en la Segunda Prosecretaría quedó la verdiblanca Paulina Ramírez.
De esta forma el Directorio legislativo lo domina por segundo año consecutivo la oposición con participación multipartidista. Tres agrupaciones políticas manejarán los hilos administrativos y de debate político en el Primer Poder de la República.
La ausencia de mujeres en cargos más elevados del Directorio obedeció más a un aspecto de acuerdo político que a falta de aspirantes. Tanto para la Presidencia del Congreso como para la Vicepresidencia hubo mujeres en las papeletas. Del tema de paridad de género se habló hasta que llegó el turno de escoger entre Arauz, la frenteamplista Suray Carrillo o el socialcrisitano William Alvarado para la Segunda Secretaría.
La dinámica la dominó el acuerdo opositor y los votos nulos o en blanco de los rojiazules que permitieron al PLN, al Movimiento Libertario y a Renovación Costarricense hacerse de los cargos en el Directorio.
Así, mientras en la municipalidad de San José Johnny Araya asumía de nuevo el cargo como alcalde capitalino, en Cuesta de Moras su exjefe de campaña en la fallida contienda electoral de 2014, Antonio Álvarez Desanti, era ungido como nuevo Presidente del Congreso.
Y al tiempo que Gonzalo Ramírez era nombrado Primer Secretario del Congreso, su esposa Paula Vargas asumía funciones junto a Araya como primera vicealcaldesa josefina.
La composición del Directorio Legislativo con hombres en los puestos principales y mujeres en puestos secundarios fue motivo de queja por parte varias diputadas, que levantaron la voz hasta llegada la elección del cuarto de seis puestos.
La primera en hacerlo fue la representante Epsy Campbell, a quien le siguió Marcela Guerrero y Nidia Jiménez, las tres de Acción Ciudadana (PAC).
Al cierre de la jornada sorprendió a propios y extraños el retiro del plenario legislativo del diputado Humberto Vargas del PUSC, quien no estuvo presente para las últimas dos elecciones.
Ante la ausencia de un sistema digital que permitiera agilizar el proceso de conteo de votos, cada elección tomó más de media hora; esto sin contar el gasto en papel por las las más de 650 papeletas que se requirieron para todas las votaciones.
El gasto por cierto, sí fue tema de preocupación para el presidente saliente del Congreso, el socialcristiano Rafael Ortíz, quien ante la lentitud llamó la atención de los diputados, de que por ser un día feriado, cada hora extra costaría alrededor de ¢600 mil adicionales en gastos administrativos.
El proceso de votaciones concluyó con la verdiblanca Paulina Ramírez a las 6:34 p.m.
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