Juzgado separa a abogado de Abelino Esquivel del proceso por ausentarse de audiencia

La audiencia del exdiputado del Partido Renovación Costarricense (PRC), Abelino Esquivel, fue suspendida este sábado luego de que no se presentara su abogado, Guido Nuñez.

En el proceso se debe definir si el exlegislador afronta un juicio donde se le señala por supuestamente haberle cobrado parte del salario a tres asesores; sin embargo, el encargado de defensor a Esquivel no apareció y el juez resolvió separarlo de la causa de manera inmediata.

De esa forma lo informó el departamento de prensa del Poder Judicial, el cual explicó que ahora deberán reprogramar una nueva audiencia, que sería ya la cuarta ocasión.

Además, el excongresista tiene hasta el próximo lunes para presentar un nuevo defensor.

El proceso de Esquivel estaba previsto para iniciar el pasado 24 de mayo, pero se trasladó al 28 y 29 de ese mismo mes debido a que el abogado de Esquivel presentó una incapacidad que impedía la realización de la audiencia.

Luego, se volvió a suspender y se cambió de fecha para este sábado a las 9:00 a.m. en el Juzgado Penal de Hacienda del II Circuito Judicial de San José, pero nadie por parte del exlegislador se presentó.

En esta audiencia deberá definirse si se acepta la petición de la Fiscalía General de abrir un juicio contra Esquivel.

"La Fiscalía acusó al exdiputado y a su hermana por cuatro delitos de concusión y uno de enriquecimiento ilícito; mientras que a la esposa del exlegislador, de apellidos Cortés Oporto, se le acusó por dos delitos de concusión y también uno de enriquecimiento ilícito", informó la oficina de prensa del Ministerio Público.

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La causa a la que se hace referencia sucede cuando un funcionario público, en uso de su cargo, exige a una persona una contribución, o bien, cuando cobra de más por las funciones que ejerce.

Este delito es castigado con una pena que va de dos a ocho años de cárcel, según el Código Penal de Costa Rica.

Se trató de localizar a Esquivel y a su abogado vía telefónica, pero ninguno de los dos atendieron.

"Contribución"

Según transcendió en abril del año pasado, el exlegislador evangélico le cobraba un porcentaje de sus salarios cada quincena a los asesores Álvaro Oconitrillo, Joselyn Rodríguez y Shirley Marín (entre ¢50 mil y ¢575 mil) sin recibir explicaciones del motivo.

En el caso del primero, era un requisito para ser contratado en agosto del año anterior, según relató al sitio digital Pulsocr. Para las trabajadoras fue un pago que les impusieron cuando ya formaban parte del despacho del congresista.

Estos funcionarios fueron despedidos el 21 de abril de 2018 por Esquivel, a una semana de que terminara la legislatura, aduciendo pérdida de confianza.

Mediante una publicación realizada en su página de Facebook, el exdiputado admitió el cobro; sin embargo, aseguró que se tratan de "contribuciones a su agrupación".

"Es cierto que los funcionarios denunciantes, han hecho depósitos a la cuenta bancaria de Wray Esquivel, en donde se lee que dichos depósitos son contribuciones al Partido Renovación Costarricense", escribió el aquel momento el excongresista.

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La persona a la que hacía referencia el exdiputado es su hermana, quien además se desempeñaba como subtesorera de la agrupación, no obstante, según la legislación sobre contribuciones a asociaciones políticas, estas deben hacerse directamente a la cuenta oficial del partido y no a terceros.

"De conformidad a mi posición de diputado por Limón, queda claro que como miembro de las distintas asambleas partidarias de mi provincia y como miembro activo de mi agrupación debo participar dentro de los diversos procesos electorales, y toda contribución que se capte la invertimos en las diferentes campañas y proselitismo en la región Caribe. Contribuciones como señalé, nunca son recibidas por mi persona sino por la Subtesorería Nacional señalada anteriormente", aseguró el exlegislador.

Otro juicio

El pasado 27 de marzo, el Juzgado Penal de Hacienda y de la Función Pública, con sede en Goicoechea, ordenó la apertura de un juicio en contra del Esquivel, por aparente tráfico de influencias.

Ello a partir de una denuncia que presentó el exministro de Justicia y Paz, Marco Feoli, en la que señaló al excongresista por supuestamente haberle solicitado la liberación de un pastor amigo suyo.