Hacienda promete a diputados recortar en enero ¢150.000 millones al presupuesto del 2021

El ministro de Hacienda, Elian Villegas, se comprometió con los diputados de la Comisión de Asuntos Hacendarios de la Asamblea Legislativa a presentar un presupuesto extraordinario en enero que permita recortar el gasto público en ¢150.000 millones.

El jerarca señaló a los legisladores que su idea es realizar los recortes haciendo una revisión detallada con cada una de las instituciones involucradas, con mayor razonabilidad que "mociones de recorte (con cambios propuestos por los diputados) que tienen problemas de diseño técnico y que afectarían el funcionamiento de los servicios públicos".

El ministro aseguró que el presupuesto para el año 2021 que se presentó en septiembre pasado ya contemplaba un recorte del 1,02% del PIB (¢368.644 millones) en su gasto primario, en comparación con el año 2020; un motivo por el cual se deben analizar con más detalle cualquier tipo de recortes adicionales.

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"En ese contexto, y dada la estrechez del presupuesto, cualquier recorte adicional a este debe hacerse con el mayor rigor técnico posible", afirmó el jerarca en su carta.

"Hemos conocido que han sido presentadas al conocimiento de esta comisión algunas mociones de recorte que tienen problemas de diseño técnico y que afectarían el normal funcionamiento de los servicios públicos que provee el Estado, con lo cual el gasto público puede volverse menor, pero a la vez se perjudica la prestación de servicios esenciales a la ciudadanía", agregó.

El ministro de Hacienda afirmó también que comprende el espíritu de los diputados y reiteró el interés del Ejecutivo de contener el gasto público. En esa línea, indicó que el compromiso de recorte lo realizan con la idea de buscar "identificar con la ayuda de las instituciones afectadas aquellos gastos que tengan menor impacto en el servicio directo a la ciudadanía".

La diputada Silvia Hernández, del Partido Liberación Nacional (PLN), acogió el compromiso de Hacienda; sin embargo, subrayó que evidencia la posibilidad de presentar un presupuesto mucho más austero del que se presentó inicialmente.

Por su parte, el diputado independiente Jonathan Prendas calificó la reacción del Gobierno como una "irresponsabilidad" por ese mismo motivo y, además, indicó que el Gobierno debería de buscar renegociaciones de deuda interna que tengan efectos mucho mayores en materia de gasto que los que plantea con ese "pequeño" recorte.

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Delicada situación

Los diputados de la Asamblea Legislativa buscan realizar recortes al Presupuesto Nacional para el año 2021, que deberá quedar dictaminado a más tardar este martes 20 de octubre.

Una importante cantidad de instituciones públicas ha manifestado su inconformidad por recortes que los diputados pretenden realizar de manera generalizada, motivo por el que el Gobierno ahora manifiesta su anuencia a buscar soluciones coordinadas con el Congreso.

La propuesta que hace el Ejecutivo ahora con el recorte de ¢150.000 millones reduciría el gasto público en un 0,4% del PIB y un 1,3% del presupuesto total de ¢11,4 billones en partidas.

El PLN ya planteó mociones con las que, según considera, recortaría ¢255.300 millones; mientras que el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) propone rebajas por el orden de los ¢150.000 millones, según publicó el fin de semana anterior el diario La Nación.

Estos recortes son los que adversa ahora Hacienda, por considerar que incluyen algunas partidas que pondrían en peligro funciones fundamentales del Estado, contratos y obligaciones ya adquiridas, y otras prioridades de pago.

Las propuestas buscan disminuir al menos una parte del desequilibrio financiero que enfrenta el país, que ya existía antes de la pandemia del nuevo coronavirus pero que se agravó ante la condición de emergencia. Este año el país cerrará con una relación negativa del 9,3% del PIB (¢3,1 billones), de los cuales 4 puntos porcentuales corresponden a la relación entre gastos e ingresos sin contar siquiera el pago de los intereses de la deuda pública.

El Estado urge reformas ante un acumulado de la deuda que cerrará por encima de 70% del PIB este año y que crecería hasta un 80,5% de la producción en 2021. Estas cifras superarían ya en 20 y 30 puntos, respectivamente, el máximo sostenible recomendado por organismos internacionales y ponen en peligro la estabilidad financiera del país en el más corto plazo.

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