Gobierno presentará propuesta de acuerdo con FMI once días antes de iniciar negociaciones formales

El Gobierno presentará oficialmente a la ciudadanía su propuesta de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en busca de financiamiento por $1.750 millones en tres años, 11 días antes de arrancar las negociaciones formales con el organismo internacional.

Así lo confirmó el ministro de Hacienda, Elian Villegas, en medio de un conversatorio virtual difundido por el propio Ministerio a través de sus redes sociales. El ministro Villegas afirmó que la propuesta se presentará al país el 17 de septiembre; mientras que las negociaciones arrancarán el 28 de este mismo mes.

"Estaremos contándole a Costa Rica cuáles son los alcances de la propuesta de negociación que estaremos llevando para efectos del acuerdo con el FMI. Se nos hace de la mayor importancia poder compartirle eso a Costa Rica, por un medio como este (presentaciones virtuales en redes sociales), que es absolutamente abierto no solo para que ustedes puedan oír cuáles son las propuestas sino también plantear las preguntas que consideren importantes", subrayó al finalizar el conservatorio, que trataba sobre el proyecto de presupuesto nacional que la cartera de Hacienda presentó esta semana al Congreso.

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Inicialmente, el propio Villegas había dicho que la propuesta "probablemente "se presentaría esta misma semana a "distintos grupos". Mencionó que la idea era arrancar las conversaciones a partir de este jueves, 3 de septiembre, en declaraciones al programa radiofónico Nuestra Voz, el pasado 1 de septiembre.

También dijo que la idea era aprovechar las "dos o tres semanas" entre la presentación de la idea y el inicio de la negociación formal con el FMI para "oír observaciones" que, asumía, "serían muchísimas".

"La negociación está para arrancar en dos o tres semanas, entonces en ese plazo es que estaremos oyendo las observaciones, que asumo ya el mismo jueves estarán llegando muchísimas y estaremos en ese proceso de aclaración, que asumo que va a ser muy intenso".

Más tarde, ese mismo 1 de septiembre, el ministro afirmó que la presentación de la propuesta realmente dependería de la disponibilidad del resto del equipo de Gobierno.

Hacienda, y el Poder Ejecutivo en general, requieren del mayor apoyo político posibles, pues la mayoría de las reformas que se propongan al FMI requerirían de aprobaciones legislativas en el Congreso. Así lo reconoció el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero, quien afirmó que se plantea presentar una propuesta "balanceada", que busque "entrarle al problema del déficit fiscal por todos sus lados y sus dimensiones, que son el lado de los ingresos, el lado de los gastos y la potencial venta de activos que son medidas para paliar y reducir el déficit fiscal".

"Ese esfuerzo de medidas requiere un balance de medidas para que sea políticamente viable y estamos conscientes de que todo eso debe ir en la propuesta de ajuste fiscal que eventualmente se tendrá que negociar con el Fondo Monetario", afirmó.

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La propuesta con el FMI

El Gobierno afirma que tendrá necesidades de financiamiento del 15% del PIB en 2021. Esta cifra representa ¢5,37 billones en deuda pública.

En esa línea, el aporte del acuerdo con el FMI representaría ingresos por ¢1 billón en tres años (¢350.000 millones por año); sin embargo, Hacienda asegura que el mayor de sus impactos correspondería a una mayor confianza de los mercados (que redundaría en mejores tasas de interés y mejores plazos de la deuda con otros organismos) y a la posibilidad de acoger compromisos políticos para reducir el déficit fiscal.

Este último punto, los compromisos para reducir el déficit fiscal (y las necesidades de adquirir nuevas deudas), es precisamente el que se negociará con el Fondo en los próximos días. La meta principal es reducir el déficit financiero primario (la relación entre gastos e ingresos sin contar el pago de la deuda), que es el indicador que obliga al Gobierno a aumentar sus niveles de deuda de manera sostenida.

Esta diferencia estaba proyectada a alcanzar un 1,3% del PIB, antes de la pandemia del SARS-CoV-2. Es decir, una diferencia negativa de ¢461.500 millones. No obstante, el desequilibrio ahora se estima en un 4% del PIB, casi ¢1,38 billones.

Para cerrar esta brecha, el Gobierno ha insinuado la necesidad de promover reformas para aumentar las bases impositivas de algunos impuestos, la realización de ventas de activos estatales y la reducción de gastos a través de herramientas presupuestarias y posibles reformas.

El Gobierno ya negoció y obtuvo la aprobación final legislativa de un crédito por $504 millones con el FMI. No obstante, dicha operación era de apoyo presupuestario, regular, y no requería de compromisos como el nuevo acuerdo ampliado que se estará negociando a partir del 29 de este mes de septiembre.

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