Finca costarricense será parte documental sobre cómo vivir con energías renovables en América Latina
<i>Electric Powered Odyssey</i> es el nombre del proyecto que busca proyectarse en canales de televisión
Luis Carlos Bogantes
21/05/16 | 08:15am
Un periodista, una cineasta, una motocicleta eléctrica y un récord de 27.882 kilómetros son los ingredientes para descubrir que existen muchas personas que logran sobrevivir con energías renovables en el continente americano.
El documental Electric Powered Odyssey es una producción realizada por el periodista estadounidense Thomas Tomczyk y la cineasta guatemalteca Ana Cosenza quien estudió Cine y Televisión en la Universidad Veritas en Costa Rica.
El documental revela la aventura vivida por Tomczyk desde su salida en Filadelfia, Estados Unidos, hasta Cabo Froward en Chile, el punto más al sur del continente americano y contará seis historias de autosuficiencia en seis países diferentes.
Uno de esos episodios se contará en Costa Rica, en la Finca Bellavista, un proyecto que cuenta con casas de árbol sustentables en la provincia de Guanacaste. Toda una aldea de autosuficiencia en las alturas.
"Nos encantó el concepto de casas árboles sustentables, porque comenzaron el proyecto al enterarse que estaban vendiendo el terreno para ser talado por árboles maderables y a ellos les pareció tan bonito que querían salvar los árboles y lograr aprovecharlos mejor", afirmó Cosenza quien se ha encargado de la edición de los seis episodios de la primera temporada.
"La idea es que esta sea la primera temporada y esperamos hacer una segunda sobre viajes en vehículos alternativos y energía renovable y sostenibilidad".
"Esta temporada esperamos tenerla al 100 por ciento editada a finales de julio y estamos trabajando en la distribución por el momento", agregó.
El viaje en moto eléctrica contó con 27.882 kilómetros y es el más largo de la historia realizado en una motocicleta eléctrica, todo un récord mundial, doblegando el récord previo impuesto por Nicola Colombo y Valerio Fumagilli quienes viajaron un total de 12.300 kilómetros desde Shanghai, China hasta Milán en Italia en 2013.
Entre los principales retos que Tomczyk enfrentó fue atravesar el desierto de Atacama en Chile debido a la escasez de puntos para poder cargar la moto. El rango de distancia que puede recorrer la motocicleta es de 160 kilómetros para ser cargada por cuatro horas.
Esto obligó a Tomczyk a planear muy bien su travesía y depender de la ayuda de muchos desconocidos que le suministrara la electricidad para cargar la batería de litio de 9 kilowatt. Durante el viaje Tomczyk sufrió varias averías como que su cadena de fibra de carbono se rompió tres veces, en Belice y Colombia por ejemplo. Thomas debía realizar las reparaciones por su cuenta ya que siempre viajó solo y no apoyado por un equipo técnico.