Entre 2010 y 2018, exportaciones de oro en bruto pasaron de 27 a 1.175 toneladas anuales

Las exportaciones de oro en bruto desde Costa Rica pasaron de acumular apenas 27 toneladas en 2010 a alcanzar las 1.175 toneladas en 2018; es decir, los totales exportados se multiplicaron casi 44 veces en ocho años después de que el país se declaró "libre de minería metálica a cielo abierto", en noviembre de 2010.

Así consta en los registros de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), consultados por AmeliaRueda.com. Los datos contabilizan un aumento abrupto en la salidas legales de oro, a pesar de que las fuentes para adquirir el material se redujeron en dicho período, ante la ilegalidad de los procesos más invasivos de extracción.

Las exportaciones del mineral promediaron las 356,1 toneladas entre 2010 y 2019; sin embargo, el grueso de las 3.561 toneladas exportadas en dicho decenio se acumuló particularmente entre 2017 y 2019. En ese período se empacaron y se movilizaron 2.537 toneladas (un 70,7 por ciento del total registrado).

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Precisamente, el aumento en las cantidades de oro exportado legalmente provocó la alerta del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA). Esta entidad del Ministerio de Seguridad Pública informó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) sobre el aumento en la actividad aérea, que inició pesquisas relacionadas.

Así lo explicó el director del OIJ, Walter Espinoza, cuando explicó los detalles sobre una operación de 32 allanamientos realizada el 20 de agosto en contra una banda sospechosa de exportar al menos $60 millones de oro que habría sido extraído ilegalmente en las localidades de Crucitas y Corcovado.

En dicha operación se logró la captura de 27 sospechosos de cometer los delitos de minería ilegal, delitos contra el ambiente y legitimación de capitales.

Por oro en bruto se entiende todas las diferentes formas en bruto, semilabradas o en polvo en las que se presenta el oro y sus aleaciones, así como el oro platinado. No comprende el oro chapado con metal precioso.

El director de Vigilancia Aérea, Juan Luis Vargas, dijo a AmeliaRueda.com, el 20 de agosto pasado, que la entidad pudo distinguir un incremento inesperado de los registros de exportaciones; sin embargo, declinó brindar mayores detalles de lo observado por tratarse de un tema en investigación judicial.

"Sí le puedo adelantar que vimos un incremento e hicimos un informe de todo lo que estaba pasando, pero no puedo dar más detalles para no afectar la investigación", comentó. Lo mismo respondió el equipo de prensa del Ministerio de Seguridad a través de un correo electrónico.

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La investigación del OIJ determinó que una banda habría logrado transportar 2.5 toneladas de oro, valorados en $60 millones, solo entre abril de 2019 y agosto de 2020, a través del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría. Estas cifras, dijo, podrían ser todavía mayores si se revisan otros períodos.

Situación minera

Información publicada por la Dirección de Geología y Minas del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), en 2018, explicó que en Costa Rica existían cuatro regiones en las que se desarrolla actividad relacionada con extracción de oro (Abangares, Montes de Oro, Dan Ramón y Zona Norte). No obstante, hacía referencia a actividades de explotación mínimas.

Para el geólogo Allan Astorga, consultor ambiental y catedrático de la Universidad de Costa Rica (UCR), las cantidades exportadas de oro no parecen lógicas en relación con la cantidad de minas activas legalmente en el país.

"Se ha dado explotación en Abangares, de forma artesanal, y sé que hay actividad ahí, pero la Dirección de Geología y Minas dijo en 2016 que ahí se producían cerca de unos 5 kilogramos por mes, entonces el resto sería prácticamente explotación ilegal en otras zonas como Crucitas", explicó.

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Recién este 19 de agosto, el ministro de Ambiente, Carlos Manuel Rodríguez, afirmó en entrevista con AmeliaRueda.com que su cartera manejaba la hipótesis de que parte del oro exportado por el país legalmente podría provenir de actividades ilícitas de extracción, como las que se realizan en la zona de Crucitas.

"Hay oro que sale para Nicaragua, pero hemos determinado que el oro también se legaliza y sale por medios más oficiales y formales, por aeropuertos. No sabemos si es de Crucitas, pero si no hay ninguna operación legal de minería en Costa Rica y está saliendo equis cantidad de oro todos los meses por el aeropuerto, pues la conclusión es que podría venir de Crucitas. La otra minería está en Abangares, que es la única que tiene permiso, pero no está operando; entonces la presunción es que el oro sale de Crucitas".

"Todo esto se está investigando en detalle, a nivel de la investigación que lleva el OIJ (...) las personas que sacan oro dicen que ellos vienen a comprar joyas, que las funden, que hacen lingotes y que eso es lo que están sacando, pero no hay certeza de que ese sea el medio por el cual se está sacando", explicó.

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La localidad de Crucitas se convirtió en cuna de actividades mineras ilícitas después de que la empresa canadiense Infinito Gold abandonó dichas tierras, en las que iba a desarrollar un fallido proyecto minero impulsado por la administración Arias-Sánchez (2006-2010).

La desocupación de los terrenos dejó el campo abierto para la actividad de coligalleros, que incluso han construido túneles y campamentos en la zona, los cuales han ameritado la intervención de agentes policiales.

Las actividades ilegales han generado pérdidas económicas cuantificadas en distintas cifras por diversos estudios; sin embargo, en el plano ambiental, expertos de la Universidad Nacional (UNA) han logrado determinar implicaciones que incluyen la contaminación química —inclusive con residuos de mercurio— en el agua de los ríos y otros ecosistemas de la zona.