Déficit del país alcanzará histórico 8,6% del PIB por Covid-19, estima Hacienda

El Ministerio de Hacienda proyecta un déficit fiscal del 8,6% del Producto Interno Bruto (PIB) para el año 2020. Esta cifra es 2,4 puntos porcentuales superior a la que se estimaba a inicios de este año e incluso supera los registros de la crisis de los años ochenta.

Las estimaciones las presentó la tarde de este jueves el ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves; acompañado por sus viceministros de Egresos, Alejandra Hernádez, y de Ingresos, Jorge Rodríguez.

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Según indicó el ministro Chaves, el déficit podría alcanzar hasta un 10% del PIB; sin embargo, se ejecutan una serie de medidas para conseguir recursos extraordinarios y realizar recortes al gasto que apuntan a reducir sustancialmente esa proyección.

Específicamente, el jerarca de Hacienda comentó que tramitan proyectos legislativos para acceder a ¢75.000 millones del Instituto Nacional de Seguros (INS), uno adicional para acceder a superávits por ¢139.000 millones y ya ejecuta otro para sumar ¢28.000 millones a través de la fijación del precio de los combustibles. Asimismo, dijo que pronto se planteará otro proyecto medidas para acceder a ¢140.000 millones sin ejecutar del Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Sutel).

En materia de gastos, recordó que ya se presentó un presupuesto extraordinario que recortó ¢74.000 millones; y agregó que pronto se realizará un segundo recorte administrativo por ¢70.000 millones en instituciones.

Con estas medidas se busca contrarrestar parte de la caída en los ingresos del Estado, la cual se proyectó en unos ¢975.000 millones por la contracción de la economía y las moratorias aprobadas en impuestos; aunado a las inversiones en subsidios estatales, transferencias a la CCSS y al Ministerio de Salud.

A inicios de este año, Hacienda había estimado un déficit financiero del 6,2% del PIB para este 2020. Ese número representaba una leve recuperación interanual de 0,8 puntos porcentuales, producida por una mayor recaudación fiscal y una rebaja en el pago de intereses a partir de un mejores condiciones de la deuda.

Chaves comentó que la situación es lamentable, pues el país venía mostrando rasgos de recuperación a nivel de actividad económica y de equilibrio fiscal. Incluso los déficits primarios (sin contar el pago de la deuda) estaban siendo casi diez veces menores que los registros de cinco años atrás.

No obstante, el déficit primario, que estaba proyectado a ser de un 1,3% antes del Covid-19, ahora sería del 3,4% del PIB, según estimó Hacienda.

Para paliar la caída en los ingresos estatales, el Gobierno ha negociado créditos internacionales de bajo costo, como el desembolso de $508 millones que ya fue aprobado por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Además, se espera concretar un financiamiento adicional de $350 millones con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y quedan remanentes por un 1,61% del PIB de los eurobonos colocados en 2020.

Antes de la crisis, el país estimaba necesidades de financiamiento por el orden del 10,55% del PIB, las cuales aumentaron en 1,90 puntos porcentuales con la pandemia. No obstante, Chaves afirmó que por ahora las necesidades financieras del país están "bien cubiertas", con un 5,39% del PIB a través de recursos internos y un 7,06% del PIB a partir de instrumentos de deuda externa.

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Recientemente, el Banco Central también revisó las proyecciones de crecimiento económico del país para lo que resta del año. El emisor proyecta que la economía caerá un -3,6%, la peor contracción desde la crisis de inicios de los años ochenta (apenas por encima del promedio de América Latina, que se estima en un 5,2%).

En su programa macroeconómico 2020-2021, el Central había previsto un crecimiento tenue del 2,5%; sin embargo, el ajuste fue drástico por condiciones como la previsible reducción de las exportaciones y un menor consumo de los hogares.

El ministro Chaves afirmó que la crisis por el nuevo coronavirus apenas se compara con la gran depresión de los años 30, y que sería la más grande desde la Segunda Guerra Mundial. "Aún países que se reconocen por su estabilidad económica, como Alemania, proyectan caídas de su producción de hasta el 7%", afirmó.