Banco Central: Economía crecerá 2,5% en 2020, pese a mal contexto internacional

El Banco Central (BCCR) estimó crecimientos del 2,5% y del 3% para la economía nacional en los próximos dos años. Así lo anunció este jueves durante la publicación de su Programa Macroeconómico para el siguiente bienio.

Rodrigo Cubero Brealey, presidente del Banco Central, indicó que las proyecciones son “positivas”, en medio de un contexto internacional que no ofrece condiciones alentadoras por “tensiones comerciales y geopolíticas”.

Según indicó, estas tensiones ya provocaron una caída en el crecimiento internacional del 3,6% al 2,9%: un factor que incidió en un mercado internacional menos activo y una menor actividad generalizada.

En palabras del presidente del Central, 2019 estuvo marcado por una “desaceleración marcada” en el crecimiento global, una tendencia que se mantendría en el siguiente bienio.

En 2019 la inestabilidad se potenció por factores como las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, y el ‘Brexit’. Sin embargo, estas y otras nuevas tensiones, como los conflictos en Medio Oriente, preocupan.

De cualquier manera, el Central estimó que el crecimiento económico nacional se recupera. De hecho, recordó que los índices de actividad económica mostraron una mejora a partir de mediados del año pasado, producto de mejores índices de consumo.

“Empezamos a ver una recuperación de la economía a partir del segundo semestre de 2019. El índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) ha venido mostrando una recuperación económica, que es la que se mantiene”, dijo.

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Con estas previsiones, el Central espera un repunte en el crecimiento para el siguiente bienio. La entidad estimó el crecimiento de 2019 en un 2,1%, muy por debajo de lo que esperaba hace 12 meses (3,6%).

Según el Central, las estimaciones del año pasado no se pudieron cumplir por varios factores, pero especialmente por el mal ambiente internacional, una importante subejecución de inversión pública, los problemas fiscales del país y la falta de confianza que esa situación generó en el sector privado (que consumió menos).

Cubero recordó que el año fue complicado para sectores como la construcción, la agricultura y el comercio, que apenas empezaron a repuntar hasta mediados de año.

“Es una historia en dos mitades. Las actividades económicas del país tuvieron un desempeño negativo a inicios de año y un repunte durante su segunda mitad”, indicó.

Déficit al 5,9%

El Banco Central también expuso las proyecciones del Ministerio de Hacienda en materia de cifras fiscales. La entidad estima un déficit financiero del 5,9% y del 5,7% del PIB para los años 2020 y 2021.

Las cifras son 1 y 1,2 puntos porcentuales menores que el indicador que recientemente anunció el Ministerio de Hacienda para el año 2019; período para el que el desajuste cerró en 6,96% del PIB en 2019. De esa diferencia negativa, un 4,18% del PIB responde al pago de intereses.

El restante 2,78% del PIB correspondió al déficit financiero primario: la diferencia negativa entre ingresos y gastos sin contar el pago de intereses. Esta cifra es la más delicada, pues implica la necesidad de nuevos endeudamientos para el Estado.

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Según informó Hacienda, el grueso de ese déficit primario en 2019 se debió a la puesta en marcha de proyectos de infraestructura, la cancelación de acciones con la Corporación Andina de Fomento (CAF) y otras inversiones únicas de 2019, como la inversión en la reestructuración de Japdeva y la capitalización del Banco de Costa Rica por la absorción de Bancrédito.

No obstante, el Banco Central afirmó hoy que se prevén rebajas más fuertes en el déficit primario para el siguiente bienio, producto de la aplicación total de las reformas tributarias que empezaron a aplicarse a mediados del año pasado.

Entre sus proyecciones, el Banco también sostuvo su meta inflacionaria del 3%, con una tolerancia de un punto porcentual (±1 p.p.). Su proyección es que llegue al 2,5%.

Sobre otros indicadores, el presidente del BCCR, Rodrigo Cubero, afirmó que la inversión extranjera directa (IED) se mantiene “saludable”, mientras que el tipo de cambio continúa “estable”, producto de una mayor confianza en el colón.

En materia de exportaciones, dijo que el contexto es favorable para el régimen de zona franca, pero afirmó que existen riesgos como el recrudecimiento de los conflictos en Nicaragua.