Molécula de fipronil hallada en muestras de los insectos intoxicados se utiliza en la agricultura y la ganadería, y se puede adquirir sin receta en almacenes
22/08/20 | 10:57am
El agroquímico friponil y un fungicida provocaron la muerte de unas cinco millones de abejas la semana pasada en un apiario localizado en Lagunillas de Orotina, determinó un análisis de laboratorio del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa).
Ambos productos fueron encontrados el 14 de agosto anterior en los estudios aplicados a las muestras de los insectos recolectados por funcionarios de la Dirección Regional del Pacífico Central del ente adscrito al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), explicó su director de la Asesoría Jurídica, Antonio Vanderlucht, en entrevista telefónica con AmeliaRueda.com.
La primera de las fórmulas es de venta libre en almacenes de agroquímicos, por lo que puede ser expedida sin receta alguna. De acuerdo con el vocero, el friponil suele ser utilizado como desparasitante externo en animales -para quitar garrapatas o pulgas, por ejemplo- y como insecticida en las plantaciones.
Del otro producto, Vanderlucht se limitó a indicar que se trata de un fungicida genérico del que no se tiene una marca específica.
Con los resultados de los análisis de laboratorio, la dirección a cargo de la investigación inició coordinaciones con el Servicio de Extensión Agropecuaria, a fin de identificar a agricultores y ganaderos que habiten en los alrededores del apiario, para entrevistarlos y determinar si alguno empleó el agroquímico.
"Alguien tiene que haberlo utilizado. Lo que no sabemos si hubo mala o buena intención, y no tenemos en este momento a sujeto alguno a quien eventualmente preguntarle. Entonces andamos haciendo una averiguación en los alrededores del apiario a ver si logramos detectar si algún agricultor o algún ganadero lo está usando o lo usó en los últimos días para poder empezar a hacer alguna averiguación de eventuales responsabilidades", indicó el director de Asesoría Jurídica del Servicio de Salud Animal.
Vanderlucht destacó que, en el caso en cuestión, el apicultor afectado, Rigoberto Rojas, no atribuyó el hecho a una persona en particular. Esto porque, según indicó la víctima en entrevista con este medio, él encontró a sus abejas muertas el 13 de agosto, cuando arribó al apiario proveniente de su casa. Ese día, aseguró, no se veían rastros de la aplicación de productos.
Esta es la segunda oportunidad en la que el fipronil es detectado en el exterminio de apiarios en los últimos tres meses, pues también fue encontrado en mayo anterior, cuando dos millones de insectos murieron en Esparza. Dicha situación, llama la atención en la institución.
"No tenemos (posiciones sobre el químico) porque no teníamos casos. Pero pareciera que sí vamos a tener que empezar a conversar un poquito con los diferentes actores en relación a este producto, porque ya le digo, sí nos llama la atención que haya aparecido la misma molécula en el caso anterior y ahora aquí también. Tenemos que ir poco a poco, verdad. Sí es cierto, y por eso yo refiero siempre a la receta, porque en la receta se señalan cuáles son los riesgos y la receta debe ser un elemento de información que debe ser visto y estudiado por las personas que lo compran: cuál es su uso, cuáles son sus riesgos, qué es lo que puede generar. Momentáneamente, sabemos y es así, que se vende sin receta, que no es necesaria para ser expedida por un almacén de agroquímicos o por un almacén que venda productos para la agricultura o la gandería", manifestó el vocero.
El caso de las cinco millones de abejas en Orotina es además investigado por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Lea más: Apicultor denuncia ante OIJ intoxicación de sus abejas: "He considerado la posibilidad retirarme"
Noticias, reportajes videos,
investigación, infografías.
Periodismo independiente en Costa Rica.
(506)4032-7931
|
comunicados@ameliarueda.com
Privacidad