Entidad asegura que buscará reducir los impactos financieros de la emergencia del Covid-19, pero que la flotilla es necesaria para garantizar agua.
03/04/20 | 11:55am
Dos días después de que el gobierno decretó estado de Emergencia Nacional por la pandemia del coronavirus Covid-19, y cuando el país ya tenía confirmados 41 casos de la enfermedad, el Instituto Costarricense de Acueductos Alcantarillados lanzó una licitación pública para comprar 92 vehículos por un monto total de ₡2.297 millones.
Así lo confirman documentos consultados por AmeliaRueda.com en el Sistema Integrado de Compras Públicas (Sicop), los cuales detallan que la solicitud de compra se presentó el 18 de marzo de 2020.
Al día siguiente, la administración Alvarado Quesada anunció el plan PROTEGER con el objetivo de "acumular liquidez para reaccionar responsablemente ante las necesidades y de acuerdo a la evolución de la emergencia". A través de una serie de préstamos, y un eventual impuestos a los salarios públicos y privados, esa iniciativa busca sumar ₡1 millón de millones para mitigar las consecuencias de la emergencia, principalmente en el empleo y las empresas.
Consultados sobre la compra, en la institución aseguraron que necesitan los vehículos para "garantizar la continuidad del servicio de agua", ya que se encuentran en "emergencia hídrica".
El monto más elevado de la licitación corresponde a las 36 camionetas tipo pick-up, las cuales tendrían un costo total de ₡835 millones. Cuatro de ellas tiene un costo unitario de ₡21 millones y el resto tiene un valor de ₡24 millones cada una.
AyA también pretende comprar 14 camiones, cuatro motocicletas, cuatro cuadraciclos, 12 vehículos tipo mula, 10 minicargadores, 6 remolques, 2 retroexcavadores, 2 vehículos tipo rural 4x4, una minivagoneta y un montacarga.
De acuerdo con los documentos presentados, el dinero provendría de reservas presupuestarias, por lo que la solicitud no estaría adscrita a ningún proyecto específico. Además, AyA justifica la compra como parte de una “sustitución de equipo de transporte y equipo nuevo”, así como “sustitución de equipo especial y equipo nuevo”.
Consultados sobre la licitación, el departamento de prensa de la institución confirmó que continuarán con el proceso de licitación ya que todos los vehículos serán utilizados para “necesidades prioritarias” como reparación de fugas, atención de trabajos en los ríos y captaciones, instalación de tuberías, así como desarrollar obra.
La institución aseguró que entiende “con absoluta naturalidad el momento que vive el país”, pero aseguró que se está "preparando para estos efectos y dispone de un plan de equilibrio financiero ante la disminución de sus ingresos y el aumento de los costos y gastos”.
Según la institución, la decisión podría estar sujeta a revisión por su comisión de alto nivel, pero eso dependerá de cómo evolucione la emergencia.
“(La comisión) está revisando a la luz de la emergencia las acciones a emprender, por lo pronto, estamos claros que la emergencia hídrica que tenemos, que además coincide con la pandemia por Covid-19, la mejor forma de atacarla es sin duda garantizando la continuidad del servicio”, señaló la institución.
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