6 de cada 10 medidores de agua del AyA tiene desperfectos que impiden realizar cobro adecuado
Estudio de la ARESEP descubre incumplimiento de normas técnicas
09/01/17 | 11:21am
Un 60% de los medidores que emplea el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) para definir el monto que le cobra a los abonados no funcionan de forma adecuada o incumplen normas técnicas.
Lo anterior impide que se realice un cobro efectivo del consumo de los usuarios, lo que se traduce en pérdidas económicas para la institución, aunque se desconoce el monto específico.
A esa conclusión llegó la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) a través de un estudio desarrollado por el programa de Calidad de la Intendencia de Aguas. Los resultados de la evaluación fueron revelados este lunes.
Para el análisis se tomó una muestra aleatoria y representativa de 419 hidrómetros del Gran Área Metropolitana.
Los problemas más comunes de los medidores analizados fueron golpes, contaminación externa e interna, problemas de lectura, tienen fugas o están trabados.
Mala operación
El AyA tiene como política institucional que los medidores deben sustituirse cada siete años, o cuando alcance los 3000 a 4000 m3 de consumo. Para diciembre del 2015, la institución contabilizó 621.604 hidrómetros en ese condición, sin embargo, solo reemplazó 31.570 de estos, lo que equivale al 5%.
Ante los hallazgos del estudio, la Intendencia de Agua de la ARESEP le ordenó al AyA presentar un plan de acciones para solucionar las irregularidades y establecer un cronograma de mantenimiento correctivo y preventivo para el parque de medidores.
A este problema hay que agregarle que la mitad del todo el agua que procesa, trata y distribuye el AyA no es contabilizada en los medidores; lo que representa pérdidas de ¢100 mil millones anuales para la institución, pues no puede cobrar por ese servicio.
Esa "agua no contabilizada" (termino técnico que se le da al líquido cuyo consumo no se registra en los medidores) es producto de fugas y conexiones ilegales: las cuales se hacen en asentamientos o construcciones que operan de forma irregular.