Falta de transparencia marca uso de $193 millones para crisis climática en Costa Rica, según estudio

Costa Rica recibió al menos $193 millones en los últimos 10 años para combatir la crisis climática, pero la información todavía no es publicada en el sitio de transparencia del Ministerio de Ambiente.

Así lo indica un informe preliminar de la organización de datos abiertos Costa Rica Íntegra. Este estudio preliminar pidió “transparentar” la información sobre dineros para combatir el cambio climático.

Al ratificar el Acuerdo de París —principal tratado internacional para combatir el cambio climático—, Costa Rica se comprometió ante Naciones Unidas a transparentar una serie de información, entre ellas las “finanzas climáticas”.

El sitio oficial para esto se llama Sistema Nacional de Métricas de Cambio Climático (SINAMECC). Después de un año de haberse lanzado, la plataforma no ha publicado la información referente a fondos.

Ante el vacío de información, Costa Rica Íntegra elaboró por su propia cuenta una estimación de los fondos no reembolsables que ha recibido el país, según dijo el director de la organización, Andrés Araya.

“Lo que identificamos es que la página —que es muy buena y tiene datos importantes sobre otros temas— se quedó corta propiamente sobre el tema del financiamiento”, aseguró Araya.

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Por su parte, la Directora de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente, Patricia Campos, indicó que la información está disponible mediante un sitio del Ministerio de Planificación y en junio del 2021 se integrará al SINAMECC.

“Vamos paso a paso. Es algo muy reciente y no es tan simple, no solo elaborarlo, sino tener acceso a los datos”, indicó la funcionaria.

Mapear esta información es importante tanto para gobiernos como para actores privados y públicos, según una publicación de ONU Cambio Climático. Esto permitiría a los países mover recursos equitativamente entre distintas áreas.

Fondos para el clima

Para combatir la crisis climática actual, Costa Rica ha recibido en los últimos 10 años alrededor de $193 millones de fondos no reembolsables de cooperación internacional (bancos multilaterales, gobiernos y otros entes).

$76 millones de estos fondos se destinaron a proyectos que reducen emisiones, según el estudio. Este tipo de proyectos, por ejemplo, mejoran prácticas agrícolas, financian transporte limpio o mejoran el manejo de desechos en comunidades.

Reducir las emisiones mundiales es la principal recomendación científica de la ONU para evitar una crisis humanitaria “sin precedentes”, según un informe del 2019. En Costa Rica, esto se lograría principalmente limpiando el transporte, ya que este sector genera la mitad de las emisiones del país.

Pero algunos impactos del cambio climático —como huracanes y sequías— son inevitables. En esos casos, las comunidades vulnerables pueden adaptarse para tener menos daños. $58 millones de esos fondos se destinaron a esto.

Finalmente, $59 millones estuvieron destinados a proyectos que combinan ambos factores: reducir emisiones y al mismo tiempo crear comunidades más resistentes al cambio climático.

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Finanzas climáticas

El monto de $193 millones; sin embargo, no es el cuadro completo, según dijeron tanto Campos como Araya. La inversión para combatir el cambio climático viene de varias otras formas.

En primer lugar, los fondos “no reembolsables” no son la única cooperación internacional. Otra parte viene en forma de fondos “reembolsables”. Estos son créditos para obras más grandes, con intereses bajos por el valor ambiental del proyecto.

Para el tren eléctrico, por ejemplo, el país negocia un crédito con el Fondo Verde del Clima, el cual otorgaría hasta $400 millones con tasas de interés bajas. Esto por la capacidad del proyecto de reducir hasta 62.000 toneladas de CO2 cada año.

Pero, además, para ver el cuadro completo, también se debe tomar en cuenta la inversión tanto pública como privada en cambio climático, según explicó Campos. Esta parte; sin embargo, puede ser más compleja.

La Contraloría General de la República advirtió en 2017 que es difícil estimar cuántos recursos del sector público realmente se colocan para combatir el cambio climático, ya que están dispersos entre instituciones.

Ese informe recomendó crear un “marco fiscal climático”, el cual no solo incluiría el presupuesto del sector público, pero también incentivos fiscales a proyectos verdes y que muestre la demanda de recursos.

Compromiso internacional

Al ratificar el Acuerdo de París, Costa Rica se comprometió a transparentar la información climática. El país, además, prometió hacerlo a través del SINAMECC, el cual sería la plataforma oficial.

El artículo 13 de ese acuerdo pide a los países cumplir con un marco de transparencia, “con el fin de fomentar la confianza mutua y de promover la aplicación efectiva” de las medidas para reducir emisiones.

Luego, en 2019, Costa Rica presentó en su informe bianual a Naciones Unidas que “el SINAMECC es la respuesta de Costa Rica para implementar y cumplir” con el artículo 13 del Acuerdo de París.

El Ministerio de Ambiente lanzó la plataforma en 2019 y, hasta el momento, todavía sigue en desarrollo. Campos aseguró que la meta es tener una versión más completa para el 2021, cuando el país presente su siguiente informe ante la ONU.

“Nosotros esperamos que, para el próximo informe bianual (2021), vamos a tener un sistema ya andando, caminando, ejecutándose. Venimos haciendo un esfuerzo importante. Tenemos mucho que demostrar como país”, aseguró.

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